Gracia del Ángel
Gracia del Ángel
La Gracia del Ángel es un fragmento de energía angélica pura, un objeto entregado por el Ángel a los tres Nephilim originales (Alexandros †, Andrea † y Angello). Este objeto actúa como una fuente de habilidades sobrenaturales que trascienden los límites de la mortalidad y conecta a su portador con una esencia superior. Dentro de la Orden de Caballeros Santos, la Gracia del Ángel se transfiere ceremonialmente del Papa y del Paladín actuales a sus sucesores, marcando el pináculo del poder dentro de la jerarquía de los Nephilim.
Origen
Según las escrituras antiguas y relatos históricos del Vaticano, la Gracia del Ángel fue el don que permitió a los primeros Nephilim enfrentar a los demonios y proteger a la humanidad. Estos objetos (originalmente tres) fueron transmitidos de Alexandros † y Andrea † a sus primeros sucesores y así sucesivamente por generaciones hasta los tiempos modernos, cuando existe la Orden de Caballeros Santos.
Características
- Poder: La Gracia amplifica las habilidades físicas y espirituales del portador, otorgándole fuerza, velocidad y resistencia extraordinarias (superiores a las del resto de Nephilim), junto con la capacidad de manifestar un par de alas, permitiendo así el vuelo. También permite un uso avanzado de runas.
- Manifestación: La Gracia puede manifestarse visualmente como un aura resplandeciente que rodea al portador, especialmente en momentos de gran intensidad emocional o en combate al extraer su poder.
- Vínculo: Aunque es una esencia angélica, la Gracia no es completamente autónoma; requiere un corazón y alma puros para poder emplear su poder por completo.
- Habilidad única: La Gracia le permite a Claudette y Angello (por su naturaleza única de inmortales) abrir portales entre reinos, pudiendo ir y regresar a voluntad al Infierno.
Apariencia
La Gracia del Ángel se manifiesta como una esfera de energía etérea y radiante. Esta esfera parece flotar ingrávida, rodeada por un halo que pulsa con un brillo oscilante entre blanco perlado y dorado intenso. Su superficie parece líquida, moviéndose constantemente como si estuviera formada por un fuego vivo que fluye sin cesar. Cuando está vinculada, en su centro se ubica la runa Vínculo.
Su tamaño es compacto, lo suficiente para caber en la palma de una mano, pero su luz y energía llenan el espacio a su alrededor con una sensación de solemnidad. Este resplandor puede intensificarse o atenuarse según la naturaleza del ambiente en el que se encuentre.
Portadores
La Gracia del Ángel solo puede ser sostenida por un Nephilim; si un ser sobrenatural diferente la sostiene, podría recibir una descarga de energía angélica tan densa que podría acabar con su vida en un instante. Si bien es un objeto sagrado exclusivo para los Nephilim, existe una única portadora no Nephilim que ha llevado una de las tres Gracias: la Cuarta Vampiro Progenitora, Claudette Schwan‑Fiore, creación-hija del Primer Inmortal.
Debilidades
Aunque es extremadamente poderosa, la Gracia del Ángel puede llegar a drenar energéticamente al portador si se utiliza de forma excesiva, especialmente en batallas prolongadas. Por esta razón, los Candidatos a la Gracia del Ángel reciben entrenamiento especializado en fortalecimiento físico y espiritual.
Actualidad
Originalmente hubo tres Gracias; actualmente solo existen dos, debido a que Claudette, durante su primera incursión al Infierno, destruyó la suya para acabar con Lilith. Las dos Gracias restantes son portadas por la actual Papa, Sophia Bellerose‑Schwan, y por la Cuarta Vampiro Progenitora, Claudette Schwan‑Fiore.